Daniel Emerson es absuelto de la acusación de violación a una prometedora pianista de música clásica, Gaily Morton, gracias a los testimonios de sus amigos. El hermano de la joven, Albert, un prominente científico intenta ayudarla durante el juicio y no se separa ni un momento de ella. Pero el día del veredicto, justo al finalizar el juicio, Gaily se suicida tirándose desde la azotea de un edificio bajo la aterrada mirada de Albert. Cinco años después, Albert ha concluido su trabajo con Gaily. Ha convertido su cuerpo en un cyborg con extraordinarias habilidades, una máquina de matar cuya principal ambición es vengarse de los hombres que la violaron.